Algunas
fuentes creíbles establecen que el total de palabras del idioma español anda en
torno a las 90.000. Sin embargo, la mayoría de los hispanoparlantes usamos un
número muy reducido de ellas.
No es
el caso de quienes siempre encuentran el término preciso, la expresión justa,
para referirse a algo. A los demás esas personas nos provocan una mezcla de admiración
y envidia: ¡qué amplio vocabulario tiene mengana o fulano!
Ahora
bien, de las 90.000 palabras hay unas pocas que tienen la característica de
decir mucho en muy pocas letras, entre ellas:
amor luz pan
aun mamá papá
¡ay! más pero
caos mío ruin
casa nada sal
Dios ni ¡shhh!
él niña sí
ella niño sin
hija no sol
hijo nos solo
lío ¡oh! tu
luna otro yo
Más de
un lector –en el caso optimista que los hubiera- seguramente dirá para sus
adentros: ¡vaya forma de ocupar el tiempo! y agregará: ¿no tendrá otra cosa más
interesante que hacer?
En
algún momento –y para ello recurro a otras dos palabras cortas- “tal vez” les
conteste.
No hay comentarios:
Publicar un comentario