Tema recurrente en los tiempos que corren es el que tiene que ver con la
adicción de niños, adolescentes y adultos hacia las nuevas tecnologías por
medio de sus dispositivos de última generación. Con frecuencia se escucha la
opinión de expertos en el tema acerca de
los diversos efectos que produce este nuevo “síndrome” así como la formulación
de una serie de medidas preventivas.
Caeríamos en un error si consideráramos que esta situación se originó en
años recientes. Aldous Huxley alertaba a este respecto:
En Occidente, a la mayor parte de la gente se le ha hecho
indispensable leer sin objeto, escuchar sin objeto, ir a ver films sin objeto,
transformándose todo esto en inclinaciones equivalentes al alcoholismo y la
morfinomanía. Las cosas han llegado a un punto tal, que existen varios millones
de hombres y mujeres que sufren angustias verdaderas si se les impide durante
algunos días y mismo durante algunas horas, la lectura de los diarios, la
música de las radios, o la entrada a los cinematógrafos. Como los droguistas,
tienen que satisfacer su vicio, no porque el satisfacerlo les signifique un
placer activo, sino porque de no satisfacerlo se sienten dolorosamente
sub-normales e incompletos. Sin diarios, sin “vistas”, sin transmisiones, viven
una existencia disminuida; sólo logran hallarse totalmente, cuando se sumergen
en las crónicas deportivas, en los juicios criminales, en la música o en las
charlas de la radio, en los terrores, en los triunfos o en los erotismos
sustitutivos de las “vistas” cinematográficas.
Conviene recordar que Huxley
formulaba estas anotaciones en 1939 cuando la segunda guerra mundial estaba en
sus inicios.
No hay comentarios:
Publicar un comentario