De que cada vez se escribe
menos a mano no cabe la menor duda. Qué lejos quedaron aquellos tiempos de
cuidada caligrafía y del cultivo del arte de la letra.
No son pocas las ocasiones en
que la relación de la persona con su letra está lejos de ser armoniosa, uno de
los tantos ámbitos de desencuentro con uno mismo. Veamos lo que sucede con los
escritores.
Andrés Trapiello propone un símil ente la
vida y la letra: “A veces sentimos que
la vida es como nuestra letra. Ni nos gusta ni la entendemos”. Mientras que Alejandro
Zambra sostiene: “Para mí la letra
siempre fue un problema. (…) mi letra es ambigua, más o menos adulta pero
también infantil, de redondeos imperfectos. Pero no tengo una letra, en
realidad. Muchas veces ni siquiera la reconozco.” Y para aclarar el punto cita el caso de un colega: “Me
pasa lo que le pasaba a Mario Levrero en El
discurso vacío: ‘Letra grande, yo grande. Letra chica, yo chico. Letra
linda, yo lindo’.”
Otra forma de abordar el tema
es la de Antonio Muñoz Molina quien se aproxima a la vez que amplía los
terrenos de la grafología.
Una
parte del contenido fundamental de una carta escrita a mano no está en el
significado de las palabras, sino en la caligrafía, en el papel, en el tamaño
de la letra. La estética involuntaria dice lo que la conciencia está segura de
ocultar.
Y concluye ejemplificando con
el caso de dos escritores con personalidades opuestas.
Hemingway
se pone a escribir una carta y llena el papel tan glotonamente con las gesticulaciones
de su letra como llenaría con su arrogancia masculina las habitaciones en las
que entrara. Ver la firma pequeña de William Faulkner al pie de la última
página de un contrato con un estudio de Hollywood es darse cuenta de la
presencia mínima y bastante incierta que un escritor tiene en esos mundos de
negocios en los que sin embargo su trabajo es la materia prima.
No es necesario ser escritor
para reconocer el raro vínculo que mantenemos con nuestra escritura. ¿A quién
no le ha pasado ver hojas escritas en otro tiempo con su propio puño y letra a
las que contempla con total ajenidad, como poniendo en duda la autoría de
aquellos trazos?
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